viernes, 17 de agosto de 2007

La última batalla

Como decíamos en el último mensaje, todo estaba listo para regresar a Ucrania el miércoles día 1 de agosto, recoger a los niños el día dos y tras unas últimas gestiones de mero trámite, regresar con ellos a Sevilla el jueves día 9 de agosto. Esa era la teoría, la práctica ha sido otra cosa: llegamos a Kiev el día 1 por la noche y nos trasladamos a Dnipropetrovsk en tren nocturno. El jueves día 2 recogimos la sentencia firme y al presentarla ante el Registro Civil corespondiente resultó que venía incorrecta, hay que modificarla y el Juez está de vacaciones (la primera en la frente); por la tarde nos reencontramos con los niños, sencillamente espectacular, carreras, besos, abrazos, lágrimas..... Viernes dia 3, seguimos en Dnipropetrovsk, la sentencia se corrige "milagrosamente", hay que correr pues hay que presentarla en varios sitios, recoger a los niños y coger el tren de las 5 de la tarde a Kiev. Ya ese día nos dicen que la legalización de los documentos tardará y llegaremos justitos a coger el vuelo del jueves día 9. El viaje en tren de 6 horas lo hicimos encantados con los niños. Es la primera vez que les damos de cenar y que se duermen en nuestros brazos: imposible describirlo con palabras. El fin de semana lo pasamos EN FAMILIA, paseos, parques, muchas risas. Los niños están en la gloria y nosotros más. Comen y duermen de maravilla, no estrañan nada aunque se asombran de un mundo que nunca habían visto. Lunes 6 de agosto, 13:00 horas: los documentos estarán listos un día antes de lo previsto, por lo que podremos marcharnos el jueves 9 sin problemas. No cabemos de gozo. 16:00 horas: problema, los pasaportes ucranianos de los niños tienen que ser digitales según una norma nueva; nadie sabe cómo se hacen; nos dan como tiempo estimado para hacerlos TRES SEMANAS; se nos cayó el mundo encima. Para colmo hay que marcharse al día siguiente de nuevo a Dnipropetrovsk (450 km de Kiev) para hacerles una fotografía digital a los niños y volvernos; como suena!!. 18:00 horas, para hacer los pasaportes hay que enviar el expediente de la ciudad natal a Kiev y que le asignen un código (¿?), tiempo estimado cinco días; ya no vamos al día siguiente a hacer la foto digital. Martes día 7 de agosto: los cinco días para el código se quedan en uno, hay que prepararse pues al día siguiente hay que coger un tren de 6 horas a Dnipropetrovsk, hacerles una sola foto a los niños en la policía y otras 6 horas de tren de vuelta. Miércoles día 8 de agosto: un infierno, Macarena con un dedo del pie morado a causa de un tropezón persiguiendo a Valentín; Jesús con un resfriado de espanto por los bruscos cambios de temperatura; los niños completamente agotados... lo dicho, un infierno..., pero aguantamos el tirón. Los vuelos de regreso para el día siguiente, anulados. Jueves día 9 de agosto: puede que los pasaportes de los niños estén listos el lunes 13, por lo que podríamos salir el miércoles 15 o jueves 16. Parece que el temporal, aunque no cesa, pero amaina. Viernes, 10 de agosto: de pasaportes el lunes, nada de nada, con lo que irse el miércoles o el jueves un ... para nosotros. El fin de semana es agridulce: los niños siguen de maravilla ajenos por completo al problema de la salida del país; conocemos a una preja de españoles que también están a la espera de sus papeles y hacemos piña común; se nos une otra pareja de italianos que están en las mismas. Nosotros muy quemados, incómodos y nerviosos, cualquier situación que en casa no pasaría de ser anecdótica, aquí es un calvario, no aguantamos ni un minuto más esta situación. Pero como dicen que en el amor y en la guerra todo vale, ideamos un plan B. Llamamos a la Embajada de España, plantemos el problema y con una atención exquisita, nos proponen inscribir a los niños en la Embajada, sacarles un pasaporte español e intentar salir con él, y decimos intentar pues no tienen sello de entrada, y por muchos papeles y explicaciones que des, aquí se las gastan de otra manera. Hay otro problema, para los pasaportes españoles de los niños hacen falta las partidas de nacimiento nuestras expedidas por el Registro Civil de Sevilla. Y cómo sacas unas partidas de nacimiento desde Ucrania en el Registro Civil de Sevilla un viernes para que estén el lunes a primera hora EN AGOSTO? El que tiene un amigo, tiene un tesoro, y uno que no sabe bien lo agradecidos que le estaremos el resto de nuestra vida, lo consiguió. Lunes 13 y martes 14: dos días enteros entre Emabajada, potitos, agencia de viajes, parques, tasas, pañales, papeles, supermercado, fotocopias, baños..., de los nervios. Miércoles 15: previsto el regreso a España el día siguiente, nos despedimos de los amigos españoles y nos encomedamos a todos los santos para que no haya problemas en el aeropuerto al salir. Jueves 16 de agosto: toda la noche sin dormir, llegamos al maldito control de pasaportes y el policía que nos toca...ni mira a los niños, sella los cuatro pasaportes y pa´lante. Pasado el control nos miramos y fue inevitable la emoción, llamamos a nuestros respectivos padres y más de lo mismo, demasiada tensión acumulada. Un minuto después, pasada la bochornosa escena..... más potitos. Tras un viaje en avión de 7 horas con escalas en una ciudad Ucraniana, de cuyo nombre no quiero acordarme, y en Barcelona, tres horas seguidas de llanto de Alejandro, dieciséis visitas al wc de Valentín, y otros pormenores, a las 22:30 horas recogida de maletas en el aeropuerto y reencuentro con la familia y algún buen amigo que fue a recibirnos. Al final de todo............. LOS CUATRO DORMIMOS EN CASA.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Hemos aprendido mucho, muchísimo.
Gracias y
BIENVENIDOS.
Mero

Anónimo dijo...

Esta vez sí he llorado, con mi niño sentado en mis rodillas. Jesus eres un monstruo, Macarena muchos besos.

Anónimo dijo...

Bienvenidos a casa, familia. Muchos besos para los cuatro y enhorabuena!!

Soledad.

Anónimo dijo...

Enhorabuena por vuestra proeza, puesto que no es más que una proeza de gente grande como vosotros, olvidaros de lo vivido que no ha sido poco y dedicaos por entero a ellos que se lo merecen todo, ellos son lo importante y pensad como nosotros: Nos lo habréis hecho pasar canutas allí por Ucrania, pero nosotros os hemos arrancado dos pedacitos de vuestro cielo, y eso es para toda la vida, amén.
Besos y hasta siempre.

Mattia dijo...

Hola,

Enhorabuena Jesús y Macarena. Y felicidades a vuestros hijos por teneros como padres. Os he seguido con atención, ilusión, angustia y finalmente, alegría.

Un abrazo desde Bruselas,
Alfonso Monago

Anónimo dijo...

¡FELICIDADES!,acabamos de llegar de nuestras vacaciones y hemos visto las últimas noticias, estamos muy emocionados y contentos por vosotros, os deseamos toda la felicidad del mundo os la mereceis. Besitos de Isabel Mira y Antonio, nos vemos pronto

Anónimo dijo...

es estupendo que esteis aqui, me alegro muchisimo, contadnos de vez en cuando como se van adaptando los peques no? y mandad fotitos nuevas que tenemos ganas de verlos. enhorabuena.